(Crociis sativa)

Nombres populares: Azafrán de otoño, azafrán, karcom, krokos, kunkuma (sánscrito), saffer (árabe) azafrán español.

Género: Masculino.

Elemento: Fuego.

Deidades: Eos y Astarté.

Poderes: Amor, curación, felicidad, levanta vientos, deseo sexual, fuerza y poderes psíquicos.

 

Usos mágicos: Los fenicios preparaban dulce de azafrán en forma de media Luna que comían en honor de ésta y de Astarté, la diosa de la fertilidad. El azafrán se pone en

saquitos de amor y en aquellos que están destinados a producir sensaciones de deseo sexual. Se utiliza en hechizos de curación, y su infusión sirve para lavarse las manos antes de proceder a rituales curativos. En Persia (Irán) hubo un tiempo en que las mujeres embarazadas llevaban una bola de azafrán en la boca del estómago para asegurarse un parto tranquilo. Beber una infusión hecha con esta hierba le permitirá ver el futuro,

y sólo ingerir azafrán disipa la melancolía. De hecho, un autor del pasado advierte que comer demasiado azafrán puede hacer que uno “muera de júbilo”. Tener azafrán en casa evita que entre en ella las lagartijas, y llevar una guirnalda de azafrán le protege contra la embriaguez. En Irlanda las sábanas se lavaban con una infusión de azafrán para que los brazos y las piernas se fortaleciesen durante el sueño, y los antiguos persas lo utilizaban para levantar vientos.